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La ermita de Santa María la Antigua, está emplazada en la antigua anteiglesia de Lumo, en el lugar denominado Gernikazarra, que el año 1366, dio nombre a la actual Villa Foral. De antiguo se sabe existía un robledal junto a la ermita.

Según escribe David Carrero en la revista Aldaba "es posible que el nombre de la Antigua haga referencia a la imagen de Santa María y, por extensión, a la ermita. Si esto fuera cierto, habría que suponer que empezó a ser llamada así a partir del momento en que se colocara la imagen de la Virgen en la iglesia de Santa María".

Actualmente la ermita toma forma parte del complejo de la Casa de Juntas de Bizkaia. En el exterior se encuentra el roble de Gernika y la tribuna juradera bajo un templete. Delante de la ermita se halla el retoño que según tradición proviene del primitivo roble.

Edificio de planta octogonal cubierto a ocho aguas y con ábside recto. El presbiterio se encuentra flanqueado por dos grandes columnas de sillería. En la actualidad, el recinto interior está adaptado como sala de juntas. Al interior presenta grandes artesonados de madera que sustentan en ménsulas labradas. Se accede por una puerta de arco escarzano situada en el lado oeste. Tres ventanas también de arco escarzano con hermosas vidrieras situadas en los muros que dan al norte y al sur, respectivamente, permiten la iluminación del espacio interior. En un nivel inferior, tres vanos adintelados permiten la entrada de la luz en el muro orientado hacia el norte, mientras que los tres vanos que dan al sur están cegados. En la parte posterior del ábside una vidriera. En el muro que da al este, otra vidriera cierra el vano en arco escarzano. El espacio dedicado a sala de la asamblea está pavimento con losas de piedra. Grandes columnas de sillería de estilo dórico sustentan el pórtico situado a los pies, rematándose el frontis con un gran escudo de Bizkaia labrado en piedra. Se accede a través de una escalinata.

Aparece desprovista de imágenes, pero sin embargo, 28 pinturas representan la jura de los fueros, los Señores de Vizcaya y una serie de acontecimientos

Al menos desde 1609 había en esta ermita dos imágenes de Nuestra Señora y, según el Padre Henao, "por medio de la una ha obrado Dios muchos milagros". En opinión de Carmelo Etxegaray, con la sustitución del retablo en 1825 la imagen fue retirada. Tras haber estado en diferentes lugares, el 6 de mayo de 1908, el señor Jado ofreció a la Comisión de Monumentos de Vizcaya la imagen de Santa María y, a pesar de que consta en acta que se acordó darle las gracias, no consta si se recibió. Desde 1908 hasta el día de hoy nada se sabe acerca de la situación de la antigua imagen de la Antigua.

Según Carmelo Etxegaray "la nueva imagen fue regalada a la ermita, según consta en la Junta del 11 de julio de 1856, al tiempo que desapareció del primitivo retablo la imagen de Nuestra Señora de la Antigua (...)". Esta imagen, cuyo origen se sitúa a principios del siglo XIX, pasó con la recuperación de las reuniones de Juntas, al archivo y de ahí al convento de Santa Clara.

Hasta que desapareció el culto, se conservó en una arqueta de plata, sobre el Sagrario del Altar, el brazo incorrupto de San Valentín de Berriotxoa.

El edificio se conserva en buen estado.

Esta ermita en cuyo recinto se celebraron Juntas Generales del Señorío, no ha perdido hasta tiempos muy recientes, su carácter religioso.

Fue ayuda de parroquia de la de San Pedro de Lumo y hasta el año 1931 hubo un culto intenso en ella. Desde 1931 hasta 1961, solamente se celebraba misa en la solemnidad conmemorativa de la Cofradía de las Villas y Ciudad con la Tierra Llana del Señorío acordada el año 1628, el día 3 de mayo, festividad de la exaltación de la Santa Cruz, y en la festividad canónica del Beato Valentín de Berriotxoa, el 14 de julio.

El 3 de mayo de 1961, con motivo de la conmemoración de la concordia de 1628, la Diputación de Bizkaia restableció el culto dominical y la celebración de las festividades litúrgicas en esta ermita. Este culto se ha mantenido hasta la recuperación de las Juntas.

Anteriormente a la fundación de la Villa de Gernika en 1366, los Apoderados de las Juntas Generales se reunían en este lugar. Señala Ladislao de Velasco que las Juntas Generales se iniciaban con una misa del Espíritu Santo, en el mismo Salón de Juntas, en el altar de Nuestra Señora de la Antigua.

En la primitiva ermita, el cuadro pintado por Francisco de Mendieta, a primeros del siglo XVII, titulado "Besamanos al Rey Don Fernando el Católico", cuyo original se halla en el vestíbulo de la Presidencia de la Diputación Foral de Bizkaia, representa el hecho histórico del juramento de los Fueros, por el citado Rey, en Gernika, el día 30 de julio de 1476. Al fondo de la escena en el ángulo izquierdo el pintor representó la ermita de Nuestra Señora Santa María La Antigua.

Fue ermita juradera. En el documento trascrito por Ángel Rodríguez Herrero, correspondiente a "Cesión renuncia y traslado del Patronato de la Hermita Juradera de Nuestra Señora de La Antigua de Guernica, y su Casa Hospital, hecho por los Caballeros y Escuderos de la Junta General de Vizcaya, a Doña María López Moro, hija del Dr, Gonzalo Moro Corregidor que fue de Vizcaya; en atención a haber reedificado y ampliado esta ermita (...) So el arbol de Guernica a 24 de julio de 1454" se dice:

"(...) eglesia de Santa María la Antigua de Guernica donde estavan yuntados ante las sus puertas so el dicho arbol, era eglesia juradera de la dicha tierra e condado de Viscaya, e fué de tanto tiempo acá, que memoria de omnes no era en contrario, e lugar donde se acostunbra de fazer la yunta general de Viscaya ante las puertas della, so el dicho arvol (...)".

La primitiva ermita, según Sesmero, perteneció a la casa solar de Meceta y fue cedida al primer Corregidor de Bizkaia, el Doctor Gonzalo Moro. En 1410 se reconstruyó a expensas del citado Corregidor, el cual mandó ser enterrado en ella. Próximo a la ermita fundó un hospital, que el Señorío cedió en 1638, conservando su Patronato, para la hospedería y habitación del vicario de monjas de Santa Clara.

La ermita a lo largo de la historia ha sufrido diversas reconstrucciones. El 20 de diciembre de 1826 se acordó la construcción de la actual Casa de Juntas. La edificación se inició por la nave del archivo. En la Junta General de 20 de julio de 1827 se acordó reconstruir la nueva planta de la iglesia juradera. En la reconstrucción, según Zameza, se empleó piedra de las canteras de Armina, del barrio de Oka, en Gorozika. El coste total de las obras conjuntas del archivo y la iglesia ascendió a la suma de 836.365 reales y 20 maravedíes.

En lo que actualmente es el Archivo de la Casa de Juntas, se halla una imagen de la Inmaculada Concepción que anteriormente presidía el altar de la ermita.

Esta imagen fue regalada a la iglesia juradera, según consta en acta de la Junta General del 15 de julio de 1856:

"(...) al tiempo en que desapareció del primitivo retablo la Imagen de Nuestra Señora de la Antigua, ordenándose en Junta General de 15 de Julio de 1856 su adquisición y colocación "en el altar del Salón donde la Junta celebra sus sesiones" y fue declarada Patrona de Vizcaya juntamente con San Ignacio de Loyola, en Junta General de 13 de Julio de 1858".

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