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EL PUERTO ROMANO DE LA ENSENADA DE PORTUONDO (SUKARRIETA, MUNDAKA)

Durante los trabajos de prospección arqueológica realizados en el año 1986 por el equipo de arqueólogos del Poblado romano de Forua en el entorno de Urdaibai, fueron localizadas evidencias cerámicas de época romana en la ensenada de Portuondo, entre los municipios de Sukarrieta y Mundaka. Los primeros indicios procedían de la cara sur del promontorio de Portuondo, entre el viaducto del ferrocarril Bilbao a Bermeo y la misma punta de este pequeño cabo. Se trataban de diversos fragmentos de cerámica romana recogida entre la pared rocosa costera y la zona afectada por las mareas. Esta cerámica, que correspondía a los primeros siglos de esta Era (s. I a III. d.C.), presentaba evidencias de haber sido lavada y rodada por el oleaje de forma leve, lo cual nos hacía suponer una procedencia próxima. Una búsqueda más detallada permitió localizar en este mismo lugar, pero ya sobre la zona alta del promontorio de Portuondo un estrato arqueológico de cronología romana asociado a restos de un suelo y al muro de cierre de una construcción.

Los trabajos de excavación, por vía de urgencia, fueron realizados por Ana Martínez Salcedo y Mikel Unzueta durante los primeros días del mes de octubre de 1988, localizándose los restos de una estructura de habitación, de la que sólo quedaba la zona interior, dado que el resto había sido demolido por el ímpetu del mar. Del mismo modo fueron identificados otros restos arquitectónicos en el fondo de la ensenada, destacando la presencia de un espigón de mampostería caliza de aproximadamente dos metros de grosor.

Panel situado en el parque de Sukarrieta, indicando los principales puntos de Busturialdea en los que se han localizado asentamientos romanos, prerromanos y estelas.

Los materiales arqueológicos recuperados eran en su mayoría restos cerámicos de los siglos I a III d. C. Muy semejantes a los documentados en el Poblado romano de Forua. Estas piezas daban testimonio de una actividad cotidiana y relacionada con la explotación de los recursos agrícolas, ganaderos y mineros del entorno más inmediato.

Pero quizás el mayor interés de la ensenada de Portuondo estaba en la posibilidad de permitir el abrigo, evitando los vientos del norte, de las embarcaciones, las barcazas, que partiendo del puerto de Bermeo romano, transitaban ría arriba hacia los asentamientos, como el de Forua, permitiendo el comercio por la ría. Debido al escaso calado ría arriba de Portuondo, no era posible el paso de las naves comerciales romanas (Corbita) utilizadas para la navegación de cabotaje en el Cantábrico. Por ello se hacía necesario el traslado de las cargas a barcazas fluviales de menos fondo, que pudieran ascender por los serpeantes meandros de la vieja ría.

Ensenada de Portuondo. En primer plano uno de los paneles instalados.

Portuondo, abrigo y pequeño lugar de atraque, permitía el refugio y el comercio en esta zona de la ría, como lo prueba la existencia de los restos hallados. Las exploraciones de este entorno de Sukarrieta han permitido localizar, además de lo ya citado para la Punta de Portuondo, restos materiales cerámicos: fragmentos de ánfora y de cerámica romana de mesa o cocina entre la isla de Txatxarramendi y la costa. De igual manera sabemos de la recuperación de algunas monedas romanas en el entorno de la estación de ferrocarril de Sukarrieta y en el área de Toña. Por nuestra parte, también en 1988 recogimos diversos fragmentos de cerámica romana en la ladera próxima al cementerio y en las escombreras producidas por los desmontes para la construcción de las nuevas edificaciones entre éste y la carretera a Bermeo. Todo ellos son indicios indudables de la utilización de esta ensenada y su entorno más inmediatos durante los primeros siglos de esta Era como lugar del poblamiento, comercio y refugio del comercio romano.

Vista de la ensenada de Portuondo desde la isla de Txatxarramendi. En primer plano aparece el panel instalado en dicha isla.

Recientemente han sido colocados tres paneles informativos que ofrecen una recreación de cómo podría haber sido el puerto romano y su actividad comercial; uno sobre la zona de la ensenada de Portuondo, en los jardines junto a la vía del tren; otro en el embarcadero de la isla de Txatxarramendi y un panel general que muestra los principales puntos de Busturialdea en los que se han localizado asentamientos romanos, prerromanos y estelas.

Artículo escrito por Mikel Unzueta y publicado en el Urremendi-Busturialdeko doako aldizkaria (nº 7, 2007)

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